
Si dormís con tu smartphone en mano, te la pasás leyendo Twitter y Facebook durante el horario de clases o de trabajo y te querés morir cuando no te anda Wi-Fi o 3G, entonces podés estar padeciendo de una adicción a los teléfonos inteligentes.
Aunque parezca extraño, según un reciente estudio de la empresa de tecnología TeleNav Inc., los teléfonos inteligentes (o smartphones) están creando una dependencia tan profunda en sus usuarios como las drogas o el alcohol.
La investigación fue realizada en Estados Unidos entre el 15 y el 19 de julio de 2011. Se encuestó a 514 usuarios de teléfonos celulares: 254 hombres y 260 mujeres mayores de 16 años.
En términos generales, los resultados indican que más de la mitad de los encuestados prefieren renunciar a muchos de los pequeños placeres de la vida durante una semana antes que alejarse de sus teléfonos inteligentes:
- 70% de los encuestados preferiría renunciar al alcohol antes que a sus smartphones.
- 63% de los encuestados preferiría renunciar al chocolate antes que a sus smartphones.
- 55% de los encuestados preferiría renunciar a la cafeína antes que a sus smartphones.
- 54% de los encuestados preferiría no hacer ejercicio durante una semana antes que renunciar a sus smartphones.
- 33% de los encuestados preferiría no tener sexo antes que no poder utilizar sus smartphones (70% de éstos fueron mujeres).
- 21 % de los encuestados preferiría pasar una semana descalzo antes que renunciar a sus smartphones. En este caso, el porcentaje fue mayor entre los usuarios de iPhone (43%) que en los usuarios de Android (27%) y BlackBerry (25%).
Asimismo, el 66% de lo usuarios de smartphones duerme con sus teléfonos cerca, el 26% utiliza frecuentemente sus equipos durante las comidas, el 31% verifica sus equipos mientras se encuentra en el cine y el 18% admite haber terminado una relación vía mensaje de texto, email, Facebook o Twitter.
El estudio también señala que los usuarios de smartphones frecuentemente juzgan a las personas en base al tipo de dispositivo que utilizan y valoran mucho más a sus teléfonos que a sus notebooks o computadoras personales.
Por otro lado, la investigación expone que existen diferencias entre los usuarios de Android, iPhone y BlackBerry:
- Los usuarios de iPhone son más propensos que los de Android a gastar más de $40 en aplicaciones para su teléfono.
- Casi la mitad de los usuarios de Android consideraron que su teléfono refleja su estilo (en comparación con el 35% de los usuarios de iPhone y el 43% de los usuarios de BlackBerry).
- El 83% de los usuarios de iPhone elegirían como pareja romántica a otro usuario de iPhone, el 70% de los usuarios de Android elegiría como pareja a otro usuario de Android y sólo el 48% de los usuarios de BlackBerry elegiría a usuarios de BlackBerry.
- El 45% de los usuarios de iPhone y de Android han utilizado su teléfono para ver videos, en comparación con el 20% de los usuarios de BlackBerry.
Por otra parte, un estudio de Intersperience realizado en Inglaterra con la participación de 1000 individuos de entre 18 y 65 años demuestra la fuerte dependencia emocional de algunas personas con la tecnología.
Los resultados de la investigación señalaron que más de la mitad de los encuestados se sienten molestos si son privados de su conexión a Internet aunque sólo sea por un período corto de tiempo. Además, el 40% de los encuestados se siente “solo” si no pueden estar online utilizando el correo electrónico, las redes sociales, etc.
Además, el estudio incluía el desafío de pasar un día entero sin utilizar cualquier tipo de tecnologías. Algunos de los participantes consideraron que hacerlo fue tan difícil como dejar de fumar o de beber alcohol. Los más jóvenes (los nativos digitales) fueron los que más dificultades experimentaron a la hora de renunciar a la tecnología. Mientras tanto, los usuarios de más de 40 años no experimentaron tanto malestar. Sólo una minoría (23%) reaccionó positivamente ante la posibilidad de no usar las tecnologías digitales, expresando que se sentirían más libres.
Básicamente, ambos estudios son una muestra de la fuerte influencia que ejerce la tecnología en nuestras vidas: las tecnologías digitales han modificado profundamente nuestras relaciones, nuestras pautas de consumo, la forma en la que nos comunicamos y la forma en que trabajamos.
Parecería ser que ya no sólo somos dependientes de la tecnología para desarrollarnos en nuestras vidas cotidianas, sino que más bien somos adictos a la tecnología. Y vos, ¿te considerás adicto?.
Fuente: TeleNav Inc, Intersperience.